La elección de las cortinas es un tema que levanta dolor de
cabeza hasta a la persona más paciente. Debemos jugar con la luminosidad de
cada estancia, es evidente que no es lo mismo vivir en un ático que en un
primer piso. Por norma general, la primera es más luminosa que la segunda pero hay muchos elementos que pueden variar esta
circunstancia ya que, una vivienda, aunque esté situada más abajo en el
edificio, debido a su orientación, puede ser muy luminosa, y también está claro
que no es lo mismo vivir en un lugar con un clima cálido que en uno con
tendencia a llover y que oscurezca temprano.
Si lo que quieres es que entre claridad, lo adecuado es
utilizar una tela translúcida pero que proporcione suficiente intimidad. En mi caso, prefiero los tonos claros porque
vivo en una ciudad donde la mayor parte del año está lloviendo. Además son más
fáciles de combinar.
En esta ocasión os voy a hablar de la elección para las
cortinas de la cocina, para que os hagáis una idea, haré una pequeña
descripción de la cocina. Los azulejos son
blancos con una cenefa negra hacia
la mitad y las baldosas van en un negro veteado, las puertas de los muebles en
blanco y la encimera es de granito negro Zimbawe.
Con esta gama de colores como base en la cocina, pensé que
la mejor opción era continuar con la sobriedad del negro y el blanco, una
combinación clásica y atemporal que siempre funciona. Cuando llegué a Almacenes
Uría, la tienda donde habitualmente compro el género, y vi esta tela ya me
decidí que tenía que ponerla en la cocina pero como complemento de los visillos
que ya había escogido previamente.
Para tapar la caja de la persiana se pensó en un bando con la tela estampada que había escogido
y para darle un toque combinativo a los visillos se hizo la agarradera y el remate
del borde.
Podéis dar rienda suelta
a vuestra imaginación con los colores y las combinaciones que más os gusten
siempre respetando las gamas cromáticas base de la habitación que queráis decorar.
Qué original la tela de diarios y relojes!
ResponderEliminarBss