¿Quieres saber cómo rejuvenecer unas sillas demasiado serias
y transformarlas para una cocina diferente y darle un toque divertido?
¿O necesitas unas sillas para un dormitorio juvenil y estás
escaso de ideas?
Pues sigue leyendo y verás la transformación que estas
sillas de salón sufrieron.
Lo primero fue solucionar una de las patas de las sillas,
los anteriores dueños tenían un perro que se había encaprichado con morder una
pata y estaba destrozada. Así que enmasille y di forma.
Lo cierto es que me resultaron muy cómodas de tapizar porque
el asiento es un tablero, así que simplemente lo desencajé y así pude pintar la
estructura.
Mientras esta secaba me ocupé del destapizado y pronto pude
ver el resultado.
Amor a primera vista.
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